Hoy en el Reto de los 30-Días leemos…
“Pero cuando venga el Espíritu Santo sobre ustedes, recibirán poder y serán mis testigos tanto en Jerusalén como en toda Judea y Samaria, y hasta los confines de la tierra” – Hechos 1:8
Convertirse en un discípulo que hace discípulos significa que siempre tenemos nuestras antenas espirituales arriba y muy atentas. Nunca estamos “fuera de servicio”. De alguna forma, de una manera u otra, buscamos llevar las conversaciones casuales a algo más profundo, de algo más profundo a espiritual, de espiritual a una invitación. No hay nada escrito, pero al mismo tiempo, el ritmo es importante, la velocidad es importante. No hay tiempo que perder.
El reto de hoy es buscar al menos una persona con quien puedas llevar la conversación de un punto a otro. Si solamente has sido ‘casual’ en tus conversaciones con alguien, pregunta algo más profundo. Si ya has tenido conversaciones profundas, pregunta por algo espiritual. Si ya has hablado de temas espirituales, pídeles permiso, “Tu historia ha sido muy interesante; ¿Puedo compartirte MI historia?” O hazles una invitación, “Sabes… leer la Biblia se ha convertido en algo importante en mi vida, sería una falta de mi parte no invitarte a estudiarla también.” Si no conoces a alguien con quien puedas honestamente compartir tu historia, al menos llama a un amigo y pregúntale si puedes practicar contarle tu testimonio o alguna historia sobre Dios. Estamos orando por ti.
Actividad Opcional
El reto de hoy es sobre convertirte en una testigo activo de Cristo. Como actividad opcional hoy, mira esta historia de Curtis Sergeant sobre como la oración puede ayudar a conectar con el inmenso poder de Dios para dar testimonio en ti.